miércoles, 15 de junio de 2011

un medio verso medio poema... medio sentimiento media realidad

cdo haga el amor contigo si te duele, APRIETAME y abrasame
y asi sentire lo mismo que tu y tu sentiras lo mismo que yo
cdo haga el amor contigo si te da paz, acariciame y BESAME
y asi ambos pasaremos el mismo sentimiento

cdo haga el amor contigo si te da risa, hasme cosquillas y SONRIEME
y asi me reire contigo y sentiremos los dos la misma cosa, el mismo sentimiento.
cdo haga el amor contigo si sientes amor, amame y no me dejes de amar.
y asi seremos dos que nos hemos convertido en uno
pues claro que contigo sentire amor.

viernes, 3 de junio de 2011

Para fabricar un ordenador portátil se gasta más electricidad que la usada por éste en toda su vida útil

Es muy útil para el medio ambiente y para nuestro bolsillo el ahorro energético que se logra en el hogar utilizando electrodomésticos de bajo consumo, así como ordenadores y otros aparatos que cumplan con el mismo requisito. Ello sirve indirectamente para reducir las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera, ya que bastante de la electricidad generada hoy en día proviene todavía de centrales eléctricas que lo emiten como resultado de su actividad. A menor consumo eléctrico, menos CO2 emitido a la atmósfera. Sin embargo, se está dando la paradoja de que bastantes de esos aparatos de bajo consumo se fabrican en procesos que implican liberar a la atmósfera una enorme cantidad de ese gas de efecto invernadero.

Un equipo de ingenieros ha identificado ahora los puntos clave que se podrían mejorar en tales procesos industriales.

Si sus ideas se llevan a la práctica, los aparatos de bajo consumo podrían comenzar a ahorrar energía antes incluso de ser puestos en marcha por primera vez.

El equipo de Eric Williams de la Universidad Estatal de Arizona y Callie Babbitt del Instituto Golisano para la Sostenibilidad, adscrito al Instituto Tecnológico de Rochester, ha calculado que se emiten entre 227 y 270 kilogramos de dióxido de carbono al fabricar un ordenador portátil.

Las emisiones de carbono resultantes de satisfacer la demanda de fabricación de tales ordenadores en Estados Unidos durante 2002 son equivalentes, aproximadamente, a las emisiones anuales resultantes de la circulación de 676.000 automóviles.

Tanto como el 70 por ciento de la energía necesaria para construir y hacer funcionar a lo largo de su vida útil un ordenador portátil típico, se usa en su fabricación. El 30 por ciento restante corresponde a la electricidad consumida por el ordenador a lo largo de toda su vida útil.

La conclusión obvia es que en la informática se ahorraría más electricidad reduciendo la gastada en la fabricación de ordenadores en vez de reducir sólo la empleada por el usuario para hacerlos funcionar.

Williams y sus colaboradores ya han propuesto algunas posibles medidas técnicas para limitar ese consumo eléctrico en la fabricación de ordenadores.

Llegan las bujías láser

Anteriormente, los láseres lo bastante potentes como para encender la mezcla de aire y combustible de un motor eran demasiado grandes como para caber bajo el capó de un automóvil.

El equipo de Takunori Taira, de los Institutos Nacionales de Ciencias Naturales de Japón, ha desarrollado el primer sistema láser multihaz lo bastante pequeño como para poder fijarlo a la culata del motor.

De igual importancia es que el nuevo sistema láser está hecho de cerámica, y se podría fabricar a bajo costo y en grandes cantidades.

Las bujías convencionales representan un obstáculo para mejorar la economía de combustible y reducir las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx), un importante grupo de sustancias contaminantes urbanas.

Las bujías funcionan creando pequeñas chispas eléctricas de alto voltaje que atraviesan el espacio entre dos electrodos metálicos. La chispa enciende la mezcla de aire y combustible en el cilindro del motor, produciéndose una explosión controlada que empuja el pistón hasta la parte inferior del cilindro, lo cual genera la fuerza necesaria para mover el vehículo.

Los motores crean NOx como subproducto de la combustión. Es posible reducir la emisión de NOx si los motores queman más aire y menos combustible, pero eso requiere bujías más potentes, ya que la ignición es más difícil de lograr. Desafortunadamente, estos altos voltajes erosionan los electrodos de la bujía tan rápido que esta opción resulta demasiado cara. Por el contrario, los láseres, que encienden la mezcla de aire y combustible con energía óptica concentrada, no tienen electrodos y por tanto no resultan afectados por ese problema.

Los láseres también mejoran la eficiencia. Las bujías convencionales se colocan en la parte superior del cilindro y sólo encienden la mezcla de aire y combustible en sus cercanías. Los láseres pueden concentrar sus haces directamente en el centro de la mezcla. El frente de la llama se expande de modo más simétrico y hasta tres veces más rápido que los producidos por las bujías convencionales.